RÁFAGA DIURNA

"Uno está enamorado cuando se da cuenta de que otra persona es única".

Jorge Luis Borges (1899-1986) Escritor argentino.

TRES CORAZONES

"La intención de no engañar nunca, nos expone a ser engañados muchas veces".
François de la Rochefoucauld (1613-1680) Escritor francés.


Tal vez incluso llegue a conocerme algún día ¿Imaginas? Ese día me desnudaría no sólo la coraza de cuero que ahora desvisto retraido ante ti, sino la afrenta de adivinarte unicamente en el reflejo del agua; ese en el que por fin me revelas mi cara más oculta. Hasta tan denigrante precipicio ha arribado tu velero de lágrimas negras, silencioso en su deslizar de aguas revueltas para atracar por fin pernicioso aquí, justo a la derecha de mi coherencia grata para envenenarme hasta los suspiros que del alma broten. Sin embargo, no podré esconderme toda una vida de mí porque la vereda lejos de ensanchar al galope de años, va ciñendo su recodo con aprecio a uno mismo, con carencias y virtudes al unísono, huyendo del matiz del voto ajeno.

No eres más, querido yo, que mi juguete roto, vacío e incoherente. El que malvive rebosante de miedo y me abandona de nuevo dejándome tan sucios los rincones del alma... Al amparo de nada, no hay mayor espanto que el saberse obligatoriamente vivo. Sólo das la cara ante el espejo, maldito lobo cobarde a la caza del aire, y te mueres iracundo por mostrarme esos colmillos que te relamió mi luna, la misma ramera que luego me revuela de versos la pluma al atardecer del nuevo día.

Tal vez... Tal vez las aceras se me llenen de recuerdos a tu paso y los portales de aquellos besos tiernos dados a precio de nada. Pero ahí, agazapado tras un reflejo, eres un mero vencedor vencido. No depondrán mi trono tus tempestades de nostalgia por más fotos grises que desempolves, ni tu obsesión por derrocarme fuera de mí a golpes de llanto, de un modo tan ruín, como cobarde es ahondar en la llaga de un recuerdo enterrado, como a la noche le grito cuán ciego y oscuro me tornaste el universo; sólo camina el hombre en su huida del hambre...

Tal vez la juventud caduca me robe de nuevo el presente en tus labios, con tu perfume inmortal de tacones y sábanas en llamas; de cuerpos en los que volver a florecer para hallar el pasado que jamás alcancé... Pero nadie sobrevive con tres corazones querido enemigo; demasiados latidos para tan vaga certeza.

16 comentarios:

  1. Quizá uno mismo jamás llegue a conocerse del todo, nuestro corazón siempre nos tiene preparada alguna sorpresa para ponernos a prueba, para no caer en la monótona seguridad del acompasado latido.
    Quizá todo sea un engaño y, entonces, excusarse de un engaño bajo la cúpula de la mentira no sea, al final del recorrido, una mera treta de aquellos chiquillos que soñaron con perderse en el lado oscuro de la luna...

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  2. Soberbio,un texto magistral. Pero déjame que te diga, querido Miguel, que se puede sobrevivir con tres corazónes y más, o mejor dicho, no se sobrevive a ninguno. Todos son importanes para la supervivencia y todos te encaminan a la muerte, aunque sólo uno te ayude a cruzar a la otra orilla. Uno, dos, tres... Todos los "yo" que hagan falta para ganar la partida al hambre, siempre y cuando, el otro, el que no se refleja en el espejo, trascienda y reverbere en el universo. De eso se trata, ¿no?
    Un lujo siempre venir a leer.

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  3. Yo tengo uno y a veces pesa...

    Besos de Mariposa.

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  4. Querido Miguel: te voy a ser sincero. De los textos que te he leído, éste es uno de los que más me han impactado y a la vez de los que más ofuscado me dejan. Te propongo que el próximo día 16, a la sombra de un buen café y un orujo hierbas, abras la mente de tu seguro lector y amigo.

    Un abrazo

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  5. ... sino la afrenta de adivinarte unicamente en el reflejo del agua... sin embargo, no podré esconderme toda una vida de mí... al amparo de la nada...

    Intenso, brutal, las lágrimas negras, rodando por el espejo.
    Tu dualidad y un tercero... tal vez esté llegando para aligerarte el alma... tal vez, cuerpos en los que florecer... tal vez, demasiados latidos... pero no te engañes... tal vez sea, un solo corazón descompasado...

    Más no le reproches a tu Luna; él la hechiza, la embauca, pero sabes que eres su predilecto, ella siempre volverá para reflejarse en tí... y él será solo el vencedor engañado...

    Un beso sin engaños...

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  6. Gracias a todos una vez más por vuestras palabras. Estos últimos días estoy a tope de tareas y no tengo tiempo para mis cotidianas visitas a vuestros mundos, pero descuidad que en cuanto se apacigüe el temporal, volveré a tomarme un cafelito en vuestra casa. Saludos!!

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  7. Qué salao eres, Miguel! No te preocupes! Primero intenta sacar tiempo para darte un descanso. Mientras, con mi Palabrafernalia entre las manos, seguiré exprimiento cada verso. Y luego, cuando las aguas vuelvan a su cauce, te seguiremos recibiendo con las pupilas bien abiertas en nuestros blogueros mundos.
    Ahora......a cuidarse! :)

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  8. Mi único corazón se ha visto arrastrado por una ola cargada de una inmensa fuerza poética. He dejado que se fuera...¡era tan feliz...!

    Un gran beso!

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  9. Realmente increíble. Cada frase ma ha parecido un bofetón de sentimientos, un puñetazo de estados de ánimo, una patada a la cruda realidad. Ciertamente, espero y aspiro a que, algún día, me vea capaz de escribir algo la mitad de bueno que tus Tres Corazones. De momento, te dejo aquí mi humilde relato nictémero. Un saludo.

    "Algunas veces resulta más que arduo que una sonrisa te sea arrancada. Últimamente, me percato, pues me conceden pequeñas dosis de felicidad sencilleces y trivialidades. Cada vez que vago por Madrid, noto como si la Deshumanización acechase en un oscuro rincón, aguardando su oportunidad, anhelando desollar almas. Sin embargo, en una minúscula fracción de segundo, por casualidades mezcladas en el cóctel del destino, atisbas una situación que dibuja en tu cara lo que, sin duda, parece ser una sonrisa. Situaciones que, si no son enfocadas y analizadas desde un punto de vista optimista y ufano, serían relegadas donde mora el olvido: un niño con sus mini-zapatucos nuevos, una persona que ayuda presta, el pasional beso de una pareja.

    Otras, desbordas alegría y dicha. Volver donde creciste, estar con los amigos de siempre diciendo las tonterías de siempre, teniendo presente que no puede haber nada mejor que estar sentado en un velador de la plaza del pueblo, tomando el sol y con cerveza fría o cenando en casa de G. acompañados de un san Jacobo con espárragos, un vinilo de J.J. Cale, leyendo fragmentos de Alberti y Baudelaire. Por desgracia, hay sucesos que enturbian la claridad del día, hundiéndolo en la pantanosa ciénaga de la irónica hilaridad. Y así me advertí, tras una llamada de teléfono cercana a la madrugada, desvinculándome del resto e iniciando mi triste caminar solitario. ¿Y no es curioso? Cuando la dependencia de la propia estabilidad recae en alguien externo, se llega hasta ciertos límites en los que uno puede hallarse en la nación de un estado emocional y, en cuestión de segundos, desertar en acérrima tierra enemiga. Prosiguiendo en el itinerario, procuré desviarme del camino recto y saborear cada trocito de ventura envenenada. Trepé hasta las Piedras Baratas y, desde el peñasco más alto, permanecí durante largo rato observando la refulgencia de Llerena, percibiendo el llanto que arrastraba el viento e intentando discernir, al menos, un ápice de nuestro rol en el juego de la vida. Obviamente, logré lo que ansiaba: calma. Bajé, me sequé un poco la cara y, campo a través, continué en tal singular marcha al desahogo y la evasión. He de decir, que hubo quien se apiadó y alumbró la senda con empalidecida luz blanca, dejando las nubes el cielo despejado para no taparla. En lo que restaba de trayecto, los pensamientos se iban difuminando paulatinamente, ahogados en el ron que bailaba por mis venas, conservando la esperanza de que esa noche, hoy, fuese recordada como una lejana pesadilla."

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  10. Pues sí Agustín, el amor por las pequeñas cosas es el combustible del motor del mundo sin duda; gracias por tus preciosas palabras, aquí tienes tu morada. Un saludo!!

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  11. Un encantador texto. Grandes verdades prendidas con gran talento narrativo.

    un abrazo.

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  12. Como siempre, fiel a mis escritos, tan agradecida como siempre amiga. Gracias infundadas por lo del talento, jejeje... Besos y mordiscos.

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  13. Por Dios Pisha, no me jodas, enormes escritos mis poemas como dices no. Enormes escritos son estas historias prosaicas entre tintes macerados de versos. Esta entrada es "increíble pero cierta", sentimiento a raudales, simplemente genial.

    Mis "flashes" no son más que inmediatez, prisa y sentimiento momentaneo plasmado en un papel, eso y nada más que eso, no son seres extraordinarios como dices. Como diría Fermín Muguruza: "...no vamos a concederles ese privilegio".

    Un abrazo amigo, a ver si vienes por Cáceres y nos tomamos unas "birrillas".

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  14. Saboreo tu escrito.. es una forma fabulosa de verte, me gusta como hablas de ti, de todo.

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  15. jajjaja... Qué muchacho... A humildad no te ganará nadie Raulito, sin duda. A ver si es verdad y pronto nos juntamos más allá de la pantalla. Un abrazo fuerte.

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  16. Me alegro Camila, gracias por tu tiempo una vez más... Besos y mordiscos.

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