"No existe nada más interesante que la conversación de dos amantes que permanecen callados".
Achile Tournier (1847-1906) Escritor francés
¿Y de qué nos valdría ser amantes reconocidos? Lo nuestro es mucho más que nacer o morir como hace el resto del mundo. Observa el fulgor de aquella estrella ¿Dirías que murió hace milenios? Pues sí, murió pero... ¿Qué más da, si aún nos ensancha el alma su resplandor?
¿Reconocidos? ¿Y por quién? ¿Y para quién...? Los amantes sólo son amantes de si mismos ¿Acaso el mundo tiene algo que objetarle a la infinidad del verbo amar? Verás. Yo no quiero un amor políticamente correcto, estipulado por pactos o acuerdos globales en base a lo que otros hayan convenido sentir en sus insulsos corazones ¿sabes? Sí, bueno... Espero no mostrarme demasiado torpe. Quiero decir, uno de esos etiquetado, acotado a que asienta complacido nuestro entorno al vernos pasear por primera vez de la mano. Niña, yo sólo puedo decirte que disfruté ensimismado con la gravedad de tu voz, ese aplomo ficticio delatado por tu compulsiva danza de cigarros; las pupilas que rehuían confrontarnos las miradas... Me enamoré de tu don, esa sabiduría inerme que te otorga el peso almidonado de los años que nunca alcanzaste a vivir, siquiera a cumplir vagamente. El arañazo de días gastados a la espera de todo, al cobijo de nada; con el miedo a la resta de días que inexorable y feroz galopa hacia ti.
Adoro creer en el valor de tus palabras al soltarse de tu boca por primera vez, como retoños recién arribados a este descorazonador mundo de competencias y sortilegios. Podría incluso llegar a quererte por tu condición de hechicera, por el hecho de olvidar tu cuerpo y no desear más que palabras con el mismo anhelo pasional que del sudor compartido se desprende.
Créeme, quisiera acunarlas en mí. De hecho ya lo hice al divisar tu primer paraje de ensueño, allí donde me invitaste a escapar de mi condición de mero peatón para tornarme prestidigitador de bellos versos; razonablemente dolientes... Pero el exotismo se me torna herida al volver a casa y encontrarla allí arropada, en silencio; con mis prendas recién colgadas y los sueños dormitando, alejados del sutil engaño que nuestros labios anhelarán por siempre consumar. Y no se le acerca siquiera a la pena este sentir que se me prende ahora a la garganta, lo confieso desnudo de halagos... Lo más grande de esta vida es mirarla feliz porque te siente enteramente suyo, plenamente imprescindible y necesario. Con su cepillo de dientes abrazado al mío y el defecto más bello mordiéndole la silueta. Al misterio de su boca de pétalos codiciando mi persona le sobra con ese yo que nadie más alcanzará nunca a querer.
Valla con eso del amar y querer... me haces recordar el poema de "Los Amorosos" de Jaime Sabines...
ResponderEliminar"Su corazón les dice que nunca han de encontrar,
no encuentran, buscan.
Los amorosos andan como locos
porque están solos, solos, solos,
entregándose, dándose a cada rato,
llorando porque no salvan al amor."
Saludos :)
Porque no hay reglas para el amor mas que el dejarlo fluir.
ResponderEliminarPorque lo que realmente atrae y finalmente enamora no son las caricias premeditadas, las miradas estudiadas ni las escenas de telenovela, sino la sorpresa del contacto, el rubor en las mejillas al encontrarse las pupilas y la pasión y locura de eternos adolescentes.
Porque, como acertadamente escribiste un día, "la mujer perfecta no es la más guapa, puesto que hacer un mérito de su belleza sería declarar que no tiene otro mayor". Por eso enamoran los defectos que embellecen....y nos diferencian.
Un puñado de besos!!
Pase por casualidad por este blog, y ahora he decidido quedarme dentro de el, Me gusta, gracias por tus palabras.
ResponderEliminarMi Querido y admirado amante podría haber escrito la primera parte del texto...hasta:
ResponderEliminar"Podría incluso llegar a quererte por tu condición de hechicera, por el hecho de olvidar tu cuerpo y no desear más que palabras con el mismo anhelo pasional que del sudor compartido se desprende."
Sin embargo no fue él, sino tú...
A él le basta con la interesante conversación de silencios y miradas...
a mí también.
Besos de Mariposa, Lindo.
"Mientras los cepillos de dientes danzan alrededor de una hoguera donde se queman los pijamas".
Cada amante es y da como lo siente...o como espera que le retribuyan...aunque algunos son demasiado egoístas para pensar en algo más que en su propio obligo.
ResponderEliminarNo hay recetas.
un abrazo.
Qué bueno el poema Mariana!! Sin duda, toda una fuente de inspiración... Besos y mordiscos.
ResponderEliminarEn la cotidianeidad está la virtud. Cada día tendemos a alejarnos más de lo llano para perdernos en busca de una perfección equívoca. Debemos aprender a reconducirnos hacia mejor senda. Un besazo Mónica.
ResponderEliminarEn tu conclusión anda la clave Neogéminis, no hay recetas; qué sabias palabras...
ResponderEliminarBesitos Mariposa revoloteante.
Afortunado el amor que no necesita ser clamado a los cuatro vientos para sobrevivir, al que le sobra con un gesto, el que regala felicidad solamente con existir.
ResponderEliminarDigame mi señor Miguel... ¿existe aun?
Dichoso quien lo encuentra, el que es encontrado por el... pobre quien lo deja ir.
Besos apretados.
Le digo pues, mi señora Maile, que no importa si existe o no; lo indispensablemente vital es creer que existe. Sólo con eso, vivirá por siempre. Besos y mordiscos.
ResponderEliminarJodido trovador de los Coniles, al sur de las Hispanias! Eres un genio tío, y me enorgullece ser tu amigo y aprender a diario de ti.
ResponderEliminarUn abrazo maestro.
P.D: "Con su cepillo de dientes abrazado al mío y el defecto más bello mordiéndole la silueta"...
sin palabras Miguel, me ha marcao esta frase que todos pasarán por alto pero yo no.
Afortunadamente, el amor no sigue reglas. Siendo amor verdadero lo que hoy es blanco, pasado mañana es aún más blanco y con el paso de los años y de la convivencia se descubre, que bajo ese color existen otros muchos que no lo modifican, sino que lo enriquecen.
ResponderEliminarUn abrazo amigo.
mi opinión está clara: fjhoehf owdhojd owdho do pdwhp pdfhpef pfepfhe pefpe......
ResponderEliminares que ya estoy harto de decirte lo grande que son tus textos, de encontrar la palabra perfecta en cada instante, de contarlo de una manera única. Ahora bien, el amor es como viene, a veces hay que etiquetarlo y otras no, pero eso sale solo, con el fluir de los días...
pues eso, abrazos y odoe ohefdo ohweod oehdo lload ide3ien, nos vemos...
jajaja... Joío Raulito, eres adoptivo de mi Cai con esa exageración que te caracteriza...jejej. Me alegro que te haya gustado, en cuanto a la frase; dicen por ahí que no se hizo la miel... Un abrazo maestro!!
ResponderEliminarLo mejor del amor es saber mirarlo en la gama de grises amigo Luismi, es el único modo de no entallarte los dedos... Un abrazo fuerte.
ResponderEliminarJajajaj... Maldito adulador de los San Roques... Sabía que este era de los que te gustan; ya nos vamos conociendo... Ya mismo toca cine Flu, ya hablamos. Un abrazo!!
ResponderEliminar¿De que nos valdría...? Reconocidos, ¿Por quien, para quien...? Demasiadas preguntas; ¿Te vuelve a surgir la duda? ¿Estás seguro de querer las respuestas o las lanzas al aire...?
ResponderEliminarLa eterna duda, entre la razón y el corazón.
Yo tengo mis respuestas, cada cual, debe afanarse por encontrar las suyas.
No quiero enseñarle al mundo, como paseo cogida de la mano de nadie...
...podría llegar a quererte por tu condición de mago de las palabras... porque no busco un compañero para mi cepillo de dientes...
Tienes el don de que nos reflejemos en tus escritos...
Un beso en silencio...
Ay Mercedes... Ay... Cuídate de que la tela de algún texto se te ciña exacta al cuerpo... Gracias como siempre por estar ahí, besos y mordiscos.
ResponderEliminarAbsorto
ResponderEliminarJajaj... Ya puedes despertar Alvarito...jjjeje. Un saludo!!
ResponderEliminarBuaff... inexplicable.
ResponderEliminar"¿Reconocidos? ¿Y por quién? ¿Y para quién...? Los amantes sólo son amantes de si mismos ¿Acaso el mundo tiene algo que objetarle a la infinidad del verbo amar?"
Eres genial, en serio. Eso lo llevaría en el corazón tatuado :)
Un beso enorme!!
Muchas gracias Jude, esta vez me he ahorrado comentar en tu siguiente entrega del viaje, porque me hace sentirme viejo ¿Sabes? Es que un día también fui tú. Un besazo guapísima.
ResponderEliminarSublime,como esgrimes las palabras para dar con ellas un certero "touche" en el corazón de quien las lee.
ResponderEliminarUn abrazo
me quedo sin voz cada vez que te leo, arañas el corazón y traes los mejores recuerdos a mí con cada palabra...
ResponderEliminarhoy recordé algo sobre el querer y el amor:
"Es advertir en unos ojos una mirada verdadera que
nos mira.
Es escuchar en una boca la propia voz profundamente
repetida..."
" Es entender la pensativa conversación del corazón
y la distancia.
Es encontrar el derrotero que lleva al reino de la música
sin tasa..."
" Es asombrarse y alegrarse de que la luna todavía
sea luna.
Es comprobar en cuerpo y alma que la tarea de ser hombre
es menos dura.
Es empezar a decir siempre, y en adelante no volver
a decir nunca..."
como siempre, GRACIAS!
desde Mérida, una auténtica apasionada de tus letras
"La poesía no quiere adeptos, quiere amantes."
ResponderEliminarSe me pasó antes la frase, certera como siempre; me la guardo para mis "frases preferidas"
Por cierto tu respuesta al comentario, es una afirmación o una advertencia, porque, no sé, no lo pillo, ¿me lo explicas...? jejej...
Besos y mordiscos...
Deliciosa la cita, y bella tu prosa. Me ha encantado el texto y todo tu blog. Un gran descubrimiento.
ResponderEliminarUn saludo.
Mercedes, a buen entendedor... Besos y mordiscos.
ResponderEliminarGracias por visitar estos lares Marisa, siéntete en casa. Un beso
Los amantes, a veces, pueden convertirse en enamorados....paradojas de la vida! El AMOR tiene múltiples caminos para llegar a buen puerto.
ResponderEliminarPrecioso texto Miguel.
Un abrazo. :-)
Hombre Carmela, qué alegría volver a tenerte por aquí... Pues sí, el idioma de los amantes a veces también es un modo de enamorarse. Gracias por tus palabras, besos y mordiscos.
ResponderEliminarNi mejor, ni peor, ni igual, diferente siempre....
ResponderEliminarUhmm secreto entre amantes. El amor no entiende de normas ni formas, siempre es lo que sale del mismo cuore y con cada entre dos es distinto, único e irrepetible.
No importa si es secreto, si lo ven....sólo el sentimiento entre los dos y lo que se viva
Un besito canijo
Dichosos los ojos lunita... Me gustó sobremanera lo del cuore, jejeje... A ver si se apacigua el temporal y volvemos a vernos las caras. Besos y mordiscos gitanos.
ResponderEliminarEl amor no existe como tal, somos nosotros los que le damos la vida. Nace en nosotros, invadiendo cada uno de nuestros sentidos, y desde luego nada tiene que ver con pactos ni reconocimientos sociales. Es en la reciprocidad de ese sentimiento, donde nos sentimos plenos. Ni tiempo ni lugar, ni firmas ni compromisos, solo dos, en libertad...amándose...
ResponderEliminarBsos
Podríamos hablar de amor una vida entera y siempre quedaría todo por decir.
ResponderEliminarBesicos.
Ginebra, preciosas palabras cargadas de sinceridad; el sentimiento es puro y ante todo, libre.
ResponderEliminarSara, afortunadamente, al concepto me aferro para seguir pariendo palabras que luego compartamos; gracias por seguir ahí. Besos y mordiscos.