RÁFAGA DIURNA

"Uno está enamorado cuando se da cuenta de que otra persona es única".

Jorge Luis Borges (1899-1986) Escritor argentino.

SIN TU LUMBRE


Recuérdame que cierre la ventana cuando llegue el Otoño a tu cama
y olvidaré los sueños que bordamos amarrados a esa aurora tan lejana.
Me dormiré mecido entre un levante centinela y espejismos de condena,
procuraré que queden tantas cosas que robarle a es diosa de los mares.

Pero miento, no hay remedio, qué me queda
si en mi vida sin tu lumbre no hay hoguera
si el futuro se me pierde entre la arena y la brisa
deja que pueda enterrarlo ahí en tu orilla.

A media voz voy a pedirle al viento que se lleve las caricias de tu pelo
y empezaré a derramar las copas que brindaron por secretos malcurados
me encelaré cuando me diga el viento que atracaron más veleros en tu puerto
y lloraré sabiendo que las cosas han cambiado y no estoy a tu lado.

A TU LADO


Me vende el reino de la alegría,
Le robo besos bajo la lluvia,
No pierde el norte en la lejanía
Ni busca dioses que la acompañen
Y hace tiempo nos cogimos de la mano
Hasta volvernos medio locos...
Y ella se duerme bajo un techito de estrellas
Y yo respiro si mi vida va al compás de sus caderas.
Ay, se escapa el aire
Si no la tengo a mi vera
Preguntándome qué harán
Mis flores sin su Primavera.

Y a la luna la tengo en vela;
Dice que se desespera
Cuando desde su balcón
Ve esconderse el Sol en tu espalda.
Cambio el cielo por tu mirada,
Yo que soy tan afortunado
Por estar a tu lado.

La clara luz que mece en los parques
Los labios que viven para besarse
Nos dejará que pase el Invierno
Sin despertarnos de nuestro sueño.
Ay, mi vida, No permitas
que el destino ahora decida por nosotros.

3


"De tus labios una duda pendía y yo la liberé.

De tus manos dos caricias se vertían y yo las derramé.

De tus ojos mil memorias me miraron y yo siempre las recordaré"

PLAYA DE ENCINAS


La cortesía es la limosna del millonario y el desdén un zarpazo a sus desaires.
El afecto es una llaga en la boca del necio, la aversión niñez bajo sotanas.
La vida es nuestra eterna brevedad, la muerte la única certeza del hombre.
El ingenio es una chispa entre tinieblas, la simpleza el gran anhelo del sabio.


El amor es la bendita inconsciencia, la frialdad su lenta agonía.
La certidumbre es una solemne playa calma, la duda una balanza en lo vivido.
El cariño es una emoción de caramelo, el odio razones desbocadas tras su trinchera.
La inocencia es una pureza caduca, la picardía travesura de ágil muchacho.


La amistad es la joya en mi bagaje, el rencor un bozal para el olvido.
La generosidad es un presente en plena batalla, la codicia una sórdida agonía.
La felicidad es un sendero sin final, la tristeza alegría ajada en manos de la fortuna.
La esperanza es el pulmón del optimismo, el desconsuelo azabache en las paredes del alma.


La pureza es una esencia por corromper, la perversión su privada ensoñación.
El entusiasmo es el motor de la supervivencia, la melancolía goteras en la memoria.
El valor es un desplante al destino, la cobardía una huida hacia ninguna parte.

CHAPARRÓN

El futuro nos tortura y el pasado nos encadena. He ahí por qué se nos escapa el presente… Aunque en demasiadas ocasiones apetezca dejarlo escapar; en días como hoy, en tardes como ésta atiborrada de plomizas noticias en consecución, una tras otra, en sarcástica espiral, a ostiazos que llueven y duelen en las costillas sin que nadie siquiera me roce.

Es cierto a veces eso de mejor no haberte levantado, sobre todo cuando te das cuenta de que nada dependió del pie con que te levantaste; de las ilusiones o ganas con que encares e inviertas hoy tus veinticuatro horas, de lo cariñoso o cabrón que hayas sido al interaccionar con las personas que rellenan cada día tus rincones. Absolutamente nada está en nuestra mano porque la vida es así de perra y dulce. Al final el bien y el mal, lo malo y lo bueno; lo que escogemos…nunca es lo que necesitamos ya que esa es la gran broma del universo, el verdadero don que nos ha dejado Dios.

A veces nuestro destino semeja un árbol frutal en invierno. ¿Quién pensaría que esas ramas reverdecerán y florecerán? Mas esperamos que así sea, y sabemos que así será.

ENTRE LA ARENA









Anclado en mi puerto de espuma
tu cielo de rosas se tiñe de negro
y el silencio me acorrala.
Ladrones de besos acechan
Buscando unos labios dulce caramelo
De barro en los tacones
Y saliva en el cuerpo.

Entre la arena, búscame entre la arena
Oculto entre las raíces,
Esas que ya no se secan.
Maldita espera de noches que se atropellan
buscando tu primavera
dormida entre las estrellas.

Acuna tu duda en mi pecho,
navega en las alas del último vuelo
que la mirada se nos ciega.
Se enreda tu alma en mis versos
Y grita la luna desde el firmamento
Regalando caricias para el próximo encuentro

SIN ANESTESIA

Son las 2.56 de la madrugada, después de una noche de tertulia sobre la etimología de los refranes (En la mayoría de los países nórdicos, los que gobernaban las comarcas por tener la condición de ser gobernador, podían elegir a la mujer con la que deseaba intimar de su región. Cuando se producía dicha relación, el gobernador colgaba encima de la puerta de su casa unos cuernos para que todo el pueblo supiese del privilegio que tenia su familia y dicho padre de familia lucía orgulloso de sus cuernos a toda la gente. De esta costumbre nórdica salió la famosa frase: "poner los cuernos"...) me he lavado los dientes y al meterme en la cama he notado al encender la radio que tras el anuncio del nuevo Megane la vehemente voz de la presentadora pendía esta vez de un hilo.

Llamaba mientras yo apartaba mi libro sobre el fin del mundo de la mesilla un hombre advirtiendo que se iba a suicidar: "...ni trampa ni cartón (claro y conciso), no quiero mi vida, y la de mis hijos tampoco, lo siento por ellos que están en la habitación de al lado. Esta noche estarán bien, ya mañana se darán cuenta...". La presentadora le acaba de pedir en un hilo de voz el teléfono de algún familiar, él lo rechaza, no quiere darle el de su hermano, y ella hace gala de sus tablas pasándolo con un compañero que continuará atendiéndolo. Señales horarias, las 3 de la mañana, y en el parte la cabecera: "...Cristiano Ronaldo, con sus 93 millones de euros, no sería el jugador mas caro del mundo basándonos en el IPC, puesto que Zidane estaría tasado en 95,15...".
Lo más difícil de la vida es que cuando empezamos a entenderla ya pasó todo, y es demasiado tarde.

AFILANDO COLMILLOS

Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para aprender a callar. Solo conmigo, solo en mi mundo; cada vez menos solo, a ratos ausente, cada vez más harto de hombros oportunistas que bajan en su minuto de bocadillo y asueto a arreglarme el mundo. Camina por aquí, te estás equivocando, demasiados desvíos, demasiadas curvas…Pitos y camiones afuera, tan lejos de esta coraza hundida en el pecho; a penar invitaba yo al prójimo…Pobre de aquel que aun mirando nada ve, que aun sintiendo nada siente y aun entendiendo nada entiende. Pobre, pobre de aquel; rezumaba galantería y lisonja el niño de Cádiz…Un tropezón puede prevenir una caída pero, ¿acaso ando de un tiempo a esta parte trastabillando con la zancadilla del mal camino?, ¿quién acuñó el buen camino?, ¿quién la certera directriz?, ¿o acaso ando buscando caer de boca cuanto antes para que al levantarme no sea ya el corazón el que duela?. Qué sabréis de mí...
Aves carroñeras otean el horizonte en busca de su alpiste, sirenas de la mala envidia resuenan en las bocas más hurañas de la faz de esta tierra; incluso los matones de la media noche se reúnen para darme sabios consejos del embuste…El aburrimiento adormece al presto y alimenta al fisgón que solo trata de colmar su vacía monótona existencia indagando en las vidas ajenas. Hago cuanto me place cuando me place si hay buenaventura, porque puedo, porque quiero, porque ya está bien de levantarme cosido a balazos. Sino, subo al árbol más alto a reírme de cuanta anodina estupidez brote en mis dominios porque, eso son mis dominios, los míos y de nadie más; aquellos en los que sólo yo consiento, salto de alegría, lloro y amaso mis largos letargos de desamor y familia. Resuenen las trompetas, mi vida es solo mía y ni a mi dios le voy a rendir cuentas. Hay gente que no cree en nada, pero tiene demasiado miedo de todo.

APEIROFOBIA

La eternidad es una de esas paradojas que tiene la conciencia, la inquietante idea de un siempre con mayúsculas en bucle, con su espanto de ojos de plato buscando abrigo en cualquier religiosa fe que ampare a una mente frágil como pompas de jabón. Es la eternidad quien obliga al amor a buscarse un par de corazones que amarrar, no la perpetuación de la especie. La que hizo del grano trigo y del trigo pan bajo el disfraz de hogaza en pueblos como el mío, la que alimenta al cariño en su espejismo de continuidad soñada y pobre.
Es mi vida un castillo de sueños intangible.
Un cúmulo de experiencias desordenadas que desfilan a la velocidad de la luz haciéndonos creer que llegamos siquiera a rozarlas, pero todo es caduco, somos seres inconscientes por completo de la magna realidad; lo único real es que nadie se ha parado a reflexionarlo en su justa medida. Ni siquiera valdría como medicina el reencuentro con quienes se nos fueron en el camino porque ella es así, absoluta, y como tal, eternamente desapareceremos en la forma que fuimos al inicio de los tiempos, la nada. Es la propia etérea idea de lo eterno lo que nos empuja a obviarla o, en el mejor de los casos, a mirarla siquiera de soslayo.
Saber que cuanto conoces y, mucho peor, entiendes de lo que llamamos vida en toda su grandeza de continuo aprendizaje volará antes o después por más infatigable que sea nuestro empeño le resta valor a este teatro de días que seguimos quemando, es duro pero cierto; tanto como que no me salvaría ni la idea del paraíso si algún dios justo bajase a buscarme, le devolvería su biblia y le invitaría a pasar una noche en cualquier hospital infantil; cielo e infierno son símiles cuando es la aplastante e inmortal eternidad quien los va a arropar por los siglos de los siglos.

Es tan pulcra su toga y raídas sus alas que por más que lo intento no encuentro manera de justificarla y menos asumirla por completo cuando en plena madrugada, se acentúa en mis parajes de ensoñación como el crujir de puertas en una noche vacía, neurótico tras la inalcanzable concepción de su inmensidad.
Es tan inabarcable ese infinito que nuestras cabezas vienen de fábrica con las puertas que lo encierran bajo llave, ella brama en su caja de Pandora; y quién me asegura que jamás nada la hará escapar… Apeirofobia lloran quienes temen al infinito, lo mío es respeto y raciocinio mientras logre seguir teniendo claro que la felicidad es darse cuenta de que nada es demasiado importante; apartándola a mi antojo de los pasos que me guían en esta bochornosa y mojada tarde de Junio.

DIOS NO JUEGA A LOS DADOS

La más clara prueba de que existe vida inteligente en otros planetas es que aún no han venido a visitarnos. Nos lleva nuestro grado de retraso progresista a etiquetar como marcianos a cualquiera de los infinitos y magníficos entes que traspasen nuestras terráqueas fronteras. Ea, todo dios viene de Marte, qué poca educación...tan minimalista y subjetivo es nuestro estrecho vocabulario como tratar de designar a cualquier humano del planeta como conquense o sirio, ruso o libio; esta sociedad es para descojonarse. Qué pensarán de estos homo sapiens espabilados los pobres alienígenas del anillo de Saturno o cualquiera de los habitantes de las más de cien mil millones de galaxias del cosmos…Ellos sí que son conscientes de que nuestro modo masivo de desplazamiento más avanzado es el avión, con el cual llegaríamos a la Luna en 16 días, a Marte en 10 años y a nuestro querido Sol en 19, impresionante el dominio del espacio-tiempo siendo erradicados por simples virus …Los amos del planeta azul…la mente infinita que sólo escribe poesías a la Luna mientras Cruithne con sus 5 kilómetros de diámetro se pudre orbitándonos…Los mismos que podrían contar en un paquete de un kilo de azúcar con muchísima paciencia 5 millones de granos, los mismos que necesitarían 14.000.000.000.000.000 de paquetes para tener tantos granos de azúcar como estrellas hay en el universo visible con los que podríamos cubrir todos los continentes sin dejar un solo centímetro de suelo por endulzar.
Sin embargo, es el hombre tan indigno, imbécil y maravilloso en su inconsciencia, que al respirar mientras ve telebasura con un McPollo en la mano mete en sus pulmones más átomos de nitrógeno que estrellas hay en todo el Universo.
Quien dijo que la vida no es felicidad… aun no ha vivido.