"Produce una inmensa tristeza pensar que la naturaleza habla mientras el género humano no escucha".
Victor Hugo (1802-1885) Novelista francés.
Sobre la piel del mar caminaban las sombras, los sueños de nadie hacia la nada.
Sobre el estruendo de la noche calma, arrasando los labios del villano, el alma de algún héroe... De entre las bambalinas del aire, justo en el rugir de la garganta del mar, como si apenas hubiera justicia en la esencia de estar vivo, de morirse en los adentros, nació la nada.
Prendió la llama y tiritó la tierra desde las entrañas, como si quisiera sacudirse el peso de un tiempo caduco, desgastado de miedos y fortunas desventuradas. Como si algo viniera a recordarnos de nuevo nuestro lugar en el mundo, nuestro proceder incauto y doliente, nuestra posición de lirios a merced de todo.
Como si amar fuera algo en vano, como si hubiera en el derecho a réplica un sentido mismo, a la súplica más allá del mismo Dios que otros comparten. De lo impune del desastre al discreto balanceo de un ave, ahora que en el abismo ya nadie se detendrá a cantar, a mirarse en el destierro, a rescatar del olvido inmediato un amarse entre novios; un "Disculpe, lleva mi corazón en la suela de su zapato..." quiero gritarme letras, quiero callar de dolor.
A veces, sólo a veces, uno descubre que hay rincones donde lloran las gaviotas, y es ahí donde el mundo le parece tan mundo a esta voz, que silencia sus palabras.
11 de Marzo del 2011. Solidaridad con el pueblo de Japón.
Me ha conmovido la cita de Victor Hugo, y seguimos sin escuchar
ResponderEliminarSincero apoyo al que mi corazón se une. La naturaleza se rebela, y la humanidad....jamás podrá dominarla.
ResponderEliminar"Disculpe, lleva mi corazón en la suela de su zapato...". Desgarradora sentencia que resume el dolor de un pueblo.
Un besazo!
"... y tiritó la tierra desde las entrañas..." el aviso que nos da la Naturaleza cada vez es más grande, a ver si de una vez por todas la respetamos más y mejor.
ResponderEliminarGenial texto de apoyo a Japón (L)
un besazo Miguel !!
Ante esa rebeldía ya no se puede hacer nada, solo observar, pues no se puede achuchar tantos años aquello que nos da vida.
ResponderEliminarMe encantaron tus palabras Miguel. Solidaridad al máximo. Gran ejemplo de civismo.
Un abrazote enorme, fiera!
Me uno yo también en solidaridad con el pueblo nipón. Pueblo fuerte que sabrá salir quizás como nadie de una situación tan horrible como la que están viviendo.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Que pena :(
ResponderEliminarIntento imaginarme la calma en el después. Ese silencio posterior a la orgía de estruendos, cuando la devastación pasa y queda sólo el presente, tal cual, desnudo. Debe ser el silencio más atronador que pueda existir.
ResponderEliminarPobre gente y pobre tierra, que se nos sacude como a pulgas que, ahora sí, molestan.
Tremendo Miguel, tremendo, sin palabras.
ResponderEliminarUn gran abrazo artista.
Esperemos que la ilusión por volver a ver el sol no se apague en la isla asiatica.
ResponderEliminarSolo queda eso...y escribir...
Muy buen escrito!
Miguel! me sumo a este dolor de Japón y me quedo muda con tus letras...
ResponderEliminarSiento no haberte podido ver ni en Cerdanyola ni en Tarragona..., tenía esperanzas de poder verte en Tarragona pero me fue imposible... para la próxima!!
Un beso enormeeee!!!
Tremendo, espeluznante... ver como el mar enfurecido arrasa con todo lo que encuentra a su paso, dejando tras de sí devastación, muerte, silencio.... ¿Cuando nos daremos cuenta de que la naturaleza ha dejado de hablar para gritar enfurecida...?
ResponderEliminarUn beso silencioso...
La naturaleza despierta y se queja azotándonos sin piedad…
ResponderEliminarTremenda la magnitud de tus palabras amigo, que llegan en este momento de dolor e impotencia…
Bsos
Madre mía, que manera mas magnífica de escribir, de pensar, de ver el mundo... haces que cuaquier cosa al lado de estas palabras se quede pequeño. Lástima que en este caso, la belleza de tus palabras sea el adorno de la desgracia de un pueblo.
ResponderEliminarVidas reducidas a cenizas. Mientras tanto, desde aquí, seguimos igual.
Ha explotado otro reactor
El mundo se viene abajo.
Pobrecillos, menos mas que yo tengo ADSL....
Besos y felicitas!
Hermosas palabras. Japón es un ave fénix desde Hiroshima, Todo pasa y cuando la calma llegue, su bandera renacerá. Tengamos fe y mandemos luz a este planeta convulsionado. Bso
ResponderEliminar"Como si algo viniera a recordarnos de nuevo nuestro lugar en el mundo, nuestro proceder incauto y doliente, nuestra posición de lirios a merced de todo"
ResponderEliminarPalabras que estremecen porque nos recuerdan la fugacidad : "lirios a merced de todo".
Elocuente frase de Víctor Hugo.Ojalá fuese hora de empezar a escuchar el clamor de la naturaleza.
Un abrazo.
Me quedo envuelta en esa frase que nos dejas de un escritor impresionante.
ResponderEliminarHay muchos rincones donde lloran las gaviotas, muchos rincones.
Un placer pasar a leerte Miguel. Besos cielo.