
Antonio Machado 1875-1939 Poeta y prosista español
Yo te busco amor en la boca de nadie, como ama el poeta la palabra cierta, hábil en el trapecio del renglón, diestro en el verso que silencian tus andares... Como el leve surco de aire que divide nuestros cuerpos yo te amo.
En los ojos de nadie yo te miro amor, al destierro de un mirar en vano, allá donde mintieron las mentiras de un bolero y se desploman madrugadas de humo y carmín. Desde el vicio que tornaste amanecer a esta voz de un solo bando yo te adoro, como adoran las heridas serle faro a cada vida. Feliz por cantarte a los pies de la luna, allá en lo limpio de extrañarnos las manos, de enseñarnos gradual el alma en un lento proceder de días, sucesivo y creciente como un campo de amapolas en los besos de nadie, hasta restallarle todas las primaveras al mundo.
Ahí, en la muerte de la sucia duda danza el dios verdadero que todos buscan, en la sed que al fin calma de por vida bajo el alma descalza, ahora que sonrío por saberle el tú a mi yo en nosotros, como si nadie pudiese ya morir en un día tan bello...
De la mano de nadie te camino la espera amor, ahora que tu ausencia me cabe en el pecho, firme en la promesa de doblarle la sombra a la luz de mis mañanas. Ahí, justo en ese viento que te anida la ropa quiero encontrarme de por vida en nadie más que tú.